Voy a darle todo el amor que él me da, voy a hablar de los días mejores que van a venir, nunca sentí este amor por nadie más ..él no es cualquiera .·

Hoy sigo siendo yo
y esto es lo que soy
no tengo explicación.
Puede que el miedo me tome de rehén, sofoque mis ganas & ya no pueda hablar.
 
Duerme y despierta con un buen sabor. Porque soñaste que me besabas,
que estuvimos en un lugar que solo tù & yo conocemos,
Y que juntos allì nos ahogábamos en pleno beso de amor.

Ya no se toma nada en seRio, La veRdad qe es un misteRio *

                    ¿Qué esperás? Mostrame todas las cartas, a cara de perro no sé jugar.
                 Me endulzas el ego siendo sincero, dale un poco y te va a pedir más.

fiel a su promesa de quemarme la cabeza,
para que yo sea infeliz..
Me enferma comprender que forma parte de mí.
                                                         ¡Quiero intoxicarme en vos!

                                                                                                                          En nuestros locos intentos,  
                                                                                                                                         renunciamos a lo que somos por lo que
                                                                                                                                      esperamos ser.


Cada vez mi amor que estas junto ami yo no puedo evitar sonreir asi es que me invade esa sensación que detiene y acelera a este corazón y yo creo que es amor desde el día que tu boca me rosó yo no puedo evitar sentir la necesidad de volver a probar tus labios de cristal.






Yo quiero de ti, tu quieres de mi.

Tienes algo que me encanta y no se que es.

 Me vuelves loca día a día con tus idas y venidas.
 Eres mejor de lo que yo esperaba,
mejor de lo que yo quería.
Entendí que nadie es bueno, y aunque muchos quieran darte, el que hoy te da la mano, mañana puede matarte.

Se miraban desde lejos con la necesidad de sentirse cerca. Él saboreaba la mirada que ella sabía esconder detrás de su flequillo.
Ella mientras escuchaba el perfume que envolvía al cuerpo de él. Ambos podían palpar las urgencias del otro. El olor de los besos que jamás se dieron enviciaba el aire
hasta ese entonces puro. Sus bocas, sin moverse, pronunciaban palabras con una dulzura tal, que el sonido las hubiera corrompido. Se miraban fijamente.
Los aromas, los sonidos -y silencios-, los gustos, las texturas, las imagenes enmarcaban la escena carente de movimiento pero plagada de acciones.
Ahí estuvieron. A esa circunstancia pertenecen.
La distancia los adora. Confunden sensaciones y resaltan emociones; nada les importa... desde lejos igual pueden sentirse.-